Los pies son la segunda parte del cuerpo más afectada por accidentes laborales, según datos del Observatorio Digital de Salud y Seguridad en el Trabajo. Una de las medidas que brinda más seguridad y puede prevenir que esta cifra aumente es el uso adecuado de los EPI (Equipos de Protección Individual), en este caso, los calzados profesionales.
Estos calzados son desarrollados, clasificados y diferenciados según los tipos de riesgos que se proponen proteger. Según la ABNT (Asociación Brasileña de Normas Técnicas), se dividen en tres categorías de productos:
Tipos de calzado
Los calzados profesionales generalmente se dividen en cinco tipos:
Tipo A: Zapatos
Tipo B: Botines
Tipo C: Botas de caña baja
Tipo D: Calzado de caña larga
Tipo E: Calzado de caña extralarga